Calahorra, 19 de enero de 2024.- La alcaldesa de Calahorra, Mónica Arcéiz, dispuso de un servicio de escolta y vigilancia a raíz de las pintadas amenazantes aparecidas el pasado 22 de octubre.
Según la documentación existente al respecto en el propio Ayuntamiento -a la que hemos tenido acceso oficial-, dicho servicio de escolta y vigilancia se extendió entre el 23 de octubre y el 25 de noviembre, pese a lo cual, Arceiz el 14 de noviembre y ante el pleno afirmó: “Yo no tengo escolta personal” y precisamente ese mismo día 14 utilizó el servicio de escolta entre las 18.00 y las 20.00 horas.
Un servicio de acompañamiento de la Policía Local uniformada en horario de mañana y también con personal del mismo cuerpo pero de paisano, entre las 15:00 y las 22:00 horas para la asistencia a diferentes actos públicos y privados fuera del Ayuntamiento o de su domicilio.
El propio Ayuntamiento de Calahorra fue quien solicitó a la delegación del gobierno la autorización, para poder prestar ese servicio de personal no uniformado en los acompañamientos de Mónica Arcéiz. También se solicitó autorización para que fuese escoltada en sus desplazamientos fuera del municipio de Calahorra, cuestión esta última que no fue autorizada, circunscribiendo la autorización a servicios dentro de la propia localidad de Calahorra.
Las pintadas amenazantes contra la Sra. Arcéiz no son las únicas aparecidas en la ciudad contra representantes políticos locales, ni mucho menos la única amenaza que estos han podido sufrir durante su mandato en el periodo democrático . Si bien es cierto que Arcéiz es la única que ha solicitado estos servicios en el ejercicio de sus funciones por este motivo. A este respecto, el grupo municipal socialista reconoce su derecho en solicitar dicho servicio si así lo considera oportuno, pero lo que no se puede tolerar es que esa circunstancia se oculte a la ciudadanía y a los representantes públicos, mucho menos faltando a la verdad.
No sólo mintió ante el pleno del 14 de noviembre sino que además en una entrevista el pasado 10 de diciembre en un medio de comunicación acusó al PSOE de mentir, por poner de manifiesto que la alcaldesa tuvo servicio de escolta tras las pintadas aparecidas.
Como queda demostrado la única que mentía era Mónica Arcéiz, algo tristemente recurrente, ya que miente de forma reiterada para salir de cualquier situación que le parezca complicada de explicar.
Fue ella quien ordenó servicio de escolta y acompañamiento a la Policía Local y quien solicitó a la delegación de gobierno disponer de agentes de paisano para sus desplazamientos tanto dentro como fuera del municipio de Calahorra. Asimismo, la señora Arcéiz ha tratado por todos los medios de ocultar la utilización de la Policía Local para este servicio de escolta y acompañamiento,y obstaculizado el acceso al grupo municipal socialista a esta información, tardando más de un mes en facilitarla cuando la ley le obliga a hacerlo en un máximo de cinco días
La señora Arcéiz tiene derecho a disponer de un servicio de acompañamiento si considera que corre riesgo su seguridad, pero en lugar de ser honesta y explicar los motivos para los cuales solicitó dichos servicios cuando ha tenido ocasión, se ha dedicado a ocultarlo de manera deliberada, lo ha negado a los medios de comunicación y ha acusado al resto de partidos políticos de mentir al poner de manifiesto la existencia de este servicio.
Todo lo manifestado demuestra la adicción de la Sra. Arcéiz a la mentira.