- Desde su reapertura, el 1 de agosto, el Centro de Participación Activa de Calahorra no dispone de aire acondicionado.
- El salón cafetería registra temperaturas superiores a los 30 grados, impidiendo la afluencia de usuarios.

Calahorra, 11 de agosto de 2025. Según indican los usuarios habituales del Centro de Participación Activa de Calahorra, desde el pasado 1 de agosto, cuando se reabrió el centro al público tras permanecer cerrado entre el 15 de julio y el 31 de julio, no han podido disponer de aire acondicionado al estar estropeado.
Los Centros de Participación Activa son espacios que cumplen una importante labor social al acoger a las personas mayores, fomentando su socialización. En el salón cafetería del centro de Calahorra, es habitual encontrar a multitud de cuadrillas de personas mayores pasando el rato, charlando o jugando a las cartas. Este espacio, en plena ola de calor, debería funcionar como un refugio climático para aquellas personas mayores cuyos hogares no disponen de climatización adecuada para afrontar los intensos calores del verano.

Sin embargo, y a pesar de que en estos momentos estamos sufriendo la mayor ola de calor, por su intensidad y duración, de lo que va de verano, el centro de Calahorra está prácticamente desierto.
Desde el pasado 1 de agosto, el aire acondicionado permanece estropeado sin que el Gobierno de La Rioja haya sido capaz de arreglar la maquinaria ni de implementar ninguna medida paliativa.
Cuando la ciudad de Calahorra, en plena ola de calor, alcanza prácticamente los 40 grados, el Gobierno de La Rioja ha sido incapaz de poner en marcha ninguna medida, como instalar ventiladores o aires acondicionados portátiles para garantizar una mejor temperatura que permita a las personas mayores refugiarse del calor en el centro.
Asimismo, en caso de no poder realizar la reparación con la suficiente rapidez y, ante la ola de calor que atravesamos, exigimos al Ayuntamiento de Calahorra que se coordine con el Gobierno de La Rioja para ofrecer alternativas.
Recordamos que es habitual que el juego de cartas sea una de las principales actividades lúdicas que los usuarios desarrollan en el centro, por lo que sería recomendable ofrecerles un espacio alternativo adecuadamente climatizado.
Las altas temperaturas no solo suponen un importante problema de confort, también afectan a la salud de las personas, en especial de aquellas más vulnerables. Por lo tanto, disponer de un espacio climatizado que permita la interacción social de las personas mayores, no es solo una cuestión de comodidad sino que es una necesidad muy importante cuya carencia afecta directamente a la salud física y mental de nuestras personas mayores.