- La alcaldesa y su concejal de hacienda se ven obligados a rectificar una modificación de crédito en un nuevo pleno extraordinario por su su incapacidad para gestionar y escuchar.
- La nueva modificación propuesta también es ilegal, puesto que no está permitido minorar partidas que ya han sido incrementadas en un mismo ejercicio.
Esta mañana ha tenido lugar un nuevo pleno extraordinario en el que, una vez más la alcaldesa, Mónica Arcéiz ha sometido a debate y aprobación una rectificación. En esta ocasión, una modificación de crédito aprobada en el pleno ordinario de julio que no se ajustaba a la legalidad.
La portavoz del PSOE en materia de Hacienda, Pilar Bazo, ya advirtió en la comisión informativa de Hacienda de julio que dicha modificación no se ajustaba a derecho puesto que faltaban los informes de justificación de la necesidad que el expediente debe contener obligatoriamente para poder ser sometida al pleno, tal y como mandata la base 5 del Presupuesto General Municipal, la Ley Reguladora de las Haciendas Locales y el Reglamento de elaboración de presupuesto de las entidades locales.
A pesar de ello, en ese pleno de julio, la alcaldesa Arcéiz y su concejal de Hacienda aprobaron esta modificación de crédito haciendo caso omiso de las advertencias del Grupo Municipal Socialista. Por ello, ahora han tenido que convocar un nuevo pleno extraordinario para rectificar y dar la razón al PSOE.
Sin embargo, la incapacidad de la señora Arcéiz y de su nuevo concejal de Hacienda carece de límites y en el pleno extraordinario de hoy, lejos de resolver el problema, han aprobado una nueva rectificación completamente ilegal, al realizarse mediante el traspaso de fondos de unas partidas a otras, tomando el dinero de la partida presupuestaria para la rehabilitación energética de la Casa Consistorial, una partida que había sido incrementada recientemente, en el pleno de mayo de 2023, hace apenas 3 meses.
Minorar una partida que en el mismo ejercicio ha sido ampliada es algo que la normativa presupuestaria impide absolutamente, y algo básico que cualquier concejal de Hacienda y cualquier alcaldesa deben saber. Concretamente, la normativa dice que “No podrán minorarse los créditos que hayan sido incrementados con suplementos o transferencias”, no dándose tampoco ninguna de las excepciones previstas en la Ley para tal efecto. (Artículo 41.1 b) del RD 500/1990, y art. 180.1 b) del RDL 2/2004).
Esta cuestión no es nueva en el Ayuntamiento de Calahorra, de hecho el propio informe que fue puesto a disposición de la Señora Arcéiz y que fue elaborado por la intervención municipal advierte claramente de que “No podrán minorarse los créditos que hayan sido incrementados con suplementos o transferencias, salvo cuanto afecten a créditos de personal, ni los créditos incorporados como consecuencia de remanentes no comprometidos procedentes de presupuestos”.
El Grupo Municipal Socialista no puede consentir el incumplimiento sistemático de la legalidad, que es la fórmula elegida por Arcéiz, Nafría y el resto de concejales para gobernar Calahorra. Una fórmula que condena a la ciudad de Calahorra al caos y la parálisis.
Las rectificaciones constantes de la Sra. Arcéiz
Este caos generado no solamente refleja la incapacidad de la Sra. Arcéiz y su concejal de Hacienda para gobernar y gestionar un Ayuntamiento, sino que también es una nueva muestra de la voluntad de la nueva alcaldesa y de su equipo de gobernar de espaldas a las normas y a la legalidad.
Solo así se explica que desde que tomara posesión, el Partido Popular solo se haya dedicado a tratar de acabar con el legado de progreso y prosperidad impulsado por el PSOE y a rectificar todos los acuerdos impulsados ilegalmente por su equipo.
Primero fue tratar de modificar el reglamento de las Aulas de Conciliación sin pasar por el pleno. Algo que tuvo que rectificar.
Posteriormente, fue la composición ilegal de las comisiones informativas, que sobrerrepresentaba a VOX al margen de la Ley, la Doctrina y la Jurisprudencia, que tuvo que ser subsanado en un pleno extraordinario.
También tuvo que convocar otro pleno extraordinario para aprobar su salario y el de sus concejales liberados, así como para permitir al concejal dimisionario de Deportes cobrar el máximo permitido legalmente del Ayuntamiento a la par que seguir percibiendo dinero de su actividad principal.
En cuarto lugar, fue la modificación de crédito para la adquisición de dos gigantes para la comparsa infantil de gigantes y cabezudos. Un dinero que fue destinado a la contratación de espectáculos musicales más costosos sin diálogo ni preaviso, pero que después se comprometieron a acometer el próximo año.
Y finalmente, ha sido esta modificación de crédito, que han tenido que invalidar por no cumplir la legalidad.
Dentro de esta misma modificación de crédito pueden advertirse además datos muy relevantes que ponen en evidencia las mentiras del PP, como aquella de que “no tenían dinero ni para pagar la luz”.
Así pues, en esta modificación de crédito aprobada hoy ya no aparece dinero supuestamente necesario para hacer frente a pagos de la luz, que por otra parte en la anterior modificación estaban destinados a una partida errónea. Y no hace falta simplemente porque es mentira. Y es que, tal y como afirmaba el PSOE disponen en el presupuesto de 2023 de 988.006,99 euros para pagar la luz, un gasto que en 2022 ascendió a 507.296.28 euros.
En todas estas cuestiones, el PSOE advirtió en privado y en público al Partido Popular para que no fueran ejecutadas o aprobadas. Pero la soberbia de la Sra. Arcéiz y de algunos concejales de su Equipo de Gobierno pudieron más y fueron finalmente aprobadas. Es por eso que el PSOE se ha visto obligado a presentar los recursos oportunos para garantizar que el Ayuntamiento de Calahorra cumple con las leyes.
Estos errores son consecuencia directa de la falta de diálogo de la Señora Arcéiz, que comenzó su gobierno saltándose la consulta de la Junta de Portavoces, y desoyendo al PSOE que ha venido advirtiendo de buena fe y dando margen a la alcaldesa para rectificar su autoritarismo y sectarismo.
Pero, puesto que no han escuchado nunca las advertencias y consejos de nuestro grupo, nos vemos abocados a un espectáculo lamentable de tener que rectificar constantemente acuerdos en sendos plenos extraordinarios, con el coste que ello supone para las arcas municipales.